lunes, 20 de abril de 2009

ZAFARRAYA - MONDRON. 12/ 04/2009



Domingo 19 de Abril de 2009.
Como es de costumbre en estas excursiones organizadas por la Diputación y el Ayuntamiento, a las 8 de la mañana estábamos todos bien ataviados en la parada esperando al autobús que nos conduciría hasta Zafarraya, donde nada mas cruzar el conocido como "boquete de Zafarraya" nos dejó, y justamente desde alli comenzaba nuestra ruta de hoy, que nos llevaría hasta Mondrón, donde nuevamente nos esperaba el autobús ya que esta ruta no era circular.

El día se presentaba muy nublado en la salida, a pesar de las previsiones meteorológicas que auguraban un tiempo mas estable, con una temperatura de 15 grados partimos de La Cala del Moral. Conforme alanzábamos en el trayecto, el tiempo empeoraba de tal forma que nos llovió en la primera parte del recorrido con cierta intensidad, pero a medida que empezamos a subir del Puente D. Manuel hacia Zafarraya, el cielo se fue aclarando y dejando de llover.

Durante todo el recorrido de la excursión no nos cayó ni una gota mas, incluso disfrutamos de algunos rayos de sol, aunque hay que decir que cuando empezamos a andar, sobre las 9'15 de la mañana hacía bastante frió, pues teníamos una temperatura de 9 grados y soplaba un viento que agudizaba aún mas la sensación de frió.
Frente a nosotros se alzaba majestuosa La Maroma que había amanecido coronada con un leve manto de nieve que timidamente se dejaba ver entre las muchas nubes que empujadas por el viento iban acariciando su cima: un espectáculo natural precioso.

Una vez adentrados en el recorrido hemos podido disfrutar de unas vistas espectaculares pues el sendero va serpenteando por lugares elevados que permiten fotografiar estampas y paisajes muy bellos. Desde las alturas hemos podido divisar el pantano de La Viñuela, bastante recuperado su contenido por cierto, y pueblos como Comares, Colmenar y Los Romanes.

Transcurridos unos Kilómetros en nuestra andadura, hicimos la primera parada para tomar algo, hacer algunas fotos y reagrupamiento del grupo. Enseguida continuamos y así entre charla y comentarios de unos y otros, llegamos casi sin darnos cuenta la mitad del recorrido aproximadamente, que coincidía con Guaro, una pequeña aldea donde nace el río que lleva su nombre y que a su vez es afluente del río Sabar. Aquí hicimos una parada mas larga, de una media hora, donde tomamos los bocadillos y algún tentempié e hicimos fotos, pues las cascadas con las que comienza el curso de este riachuelo conforman una estampa digna de ser fotografiada.
Tras este rato de descanso y después de haber repuesto energías, continuamos rumbo a Mondrón, donde concluiría nuestra ruta, no sin antes bajar el tramo, para mi mas fastidioso de todo el camino, pues era una pendiente de cemento con bastante porcentaje de inclinación, que nos llevaría hasta la misma carretera, pero que las piernas y las rodillas se resintieron al bajarla.

Una vez aquí, nos dejaron un rato libre en el que mientras algunos fueron al bar a tomar algo, otros compraron acetite en un molino que allí se encontraba a pie de carretera.
Transcurridos unos 45 minutos aproximadamente, nos dirigimos todos al autobús que nos dejaría sin ningún contratiempo, gracias a Dios, a cada uno en nuestra localidad aproximadamente a las 3 de la tarde.

Para mi ha sido una ruta bastante amena y asequible, pues no comporta gran dificultad y es por eso que he echado mucho de menos a mi hijo, que por ser menor de 14 años, no ha podido participar en la ruta, y a Paqui, Nati y Brigida, con sus respectivas niñas, hubieran disfrutado de un buen dia en contacto con la naturaleza como lo hemos hecho nosotros.

Un saludo a todos.







CRONICA DE CELES

viernes, 3 de abril de 2009

Ruta Alfarnate - Sendero de las Pilas. 29- Marzo-2009

La mañana amaneció en nuestro municipio con una brisa fresca, habían cambiado esa noche la hora al horario de verano y a más de uno le costó un poquito madrugar.
El autobús partió del Rincón de la Victoria sobre las 8 de la mañana, hizo una parada en La Cala del Moral para recogernos a los que allí vivimos, entre los que estaban José, Pablo, Salvador, Antonio ( concejal de deportes) y una servidora.

Todas las plazas iban cubiertas con 55 personas, incluso hubo gente que no pudo venir.
Pusimos rumbo a Alfarnate y nada mas llegar comprobamos que la temperatura bajó hasta 9 grados y para entrar en calor tomamos un café en el hogar del jubilado.

Alfarnate en un pueblo pequeño, tranquilo y bonito, sus gentes deberían estar aún dormidas pues sus calles estaban a esa hora algo desiertas.
Los monitores nos reunieron en la plaza para darnos las instrucciones pertinentes para nuestra seguridad, invitándonos a hacer unos ejercícios de precalentamiento.

La media de edad de los senderistas era de unos 45 años, los mas jóvenes creo que prefieren salir de noche en sábado.

La ruta era un recorrido circular de unos 12 Kms bordeando un cerro cercano, todo en llano sin ninguna dificultad.

Comenzamos a caminar sobre las 10 de la mañana, por toda la ruta la ruta no se dejaba de divisar practicamente el pueblo. Pronto hicimos la primera parada sobre las 10,30 en las Pilas del Cerezal, por todos los alrededores íbamos encontrando unas grandes pilas adosadas con agua clara.
El campo estaba sembrado en grandes extensiones de cerezos que se hallaban en flor, una flor blanca redondeada preciosa, también había cultivos de olivos, cereales y hortalizas.
La siguiente parada la hicimos para tomar el bocadillo sobre las 11,40, era muy pronto para almorzar, estuvimos parados algo más de media hora. La gente que iba casi todos se conocían, el ambiente era bastante agradable, nuestro concejal que con su buen humor siempre nos sacaba una sonrisa.

Reanudamos la marcha, hicimos una pequeña subida a través de un sembrado de cebada (espero que no lo estropeáramos demasiado), volvimos a c0ger el carril que nos llevaba de nuevo al pueblo donde llegamos sobre las 13 horas, muy pronto, el recorrido era de unas 4 horas y lo que tardamos fueron 3.
Cuando llegamos al pueblo nos dispersamos todos. Nosotros entramos en el Mesón de la Villa para tomar algo, aún recuerdo el agradable olor de una pata de jamón que asaban. Estuvimos conversando y nos conocimos todos un poquito más , a las 14 horas nos volvimos al autobús, al empezar a bajar la carretera había una densa niebla que iba desapareciendo poco a poco.
Alfarnate es el pueblo con el nivel mas alto de la provincia, en invierno hará bastante frió.
Cuando volvíamos la temperatura que marcaba el termómetro del autobús era la misma de la mañana, 9 grados.
Llegamos a La Cala sin ningún contratiempo aunque para mi fue demasiado pronto, ya que eran las 3 de la tarde.
Lo que se trata es de disfrutar de la naturaleza con amigos, conocer gente nueva, desconectar de la rutina diaria y aprovechar las múltiples posibilidades de hacer rutas a pie que nos da nuestra Málaga.
Así que esperamos repetir la experiencia, pero apuntense rápido que se quedan sin plaza.

Crónica de Patricia Romero.