sábado, 30 de enero de 2016

FARO de TORROX - BALCÓN de EUROPA, NERJA Domingo 24-01-2016



El sábado anterior y tras el concierto de presentación de la banda de la cofradía de la Virgen del Rosario de La Cala, en el antiguo bar La Recacha y al olor de un completo campero de atún y cerveza se decidió todo lo relacionado con la salida del día después.

El grupo comenzó la mañana metiéndose entre pecho y espalda un par de raciones de espléndidos tejeringos en el bar Fernando de Torrox Costa junto con el correspondiente café con leche que no fue del agrado de doña Natividad, porque todo hay que contarlo. Cierto que algunos paladares para la ocasión pidieron el oportuno pitufo matutino que con presteza fue servido en mesa con mantel de papel. El inicio prometía y es que el equipo hay que tenerlo preparado y ni que decir tiene que el estómago del senderista forma parte del material que hay que cuidar.

Como niños pequeñitos nos comportamos pues entre apéndice de masa frita, bocado va y bocado viene, todos leímos en voz alta las citas históricas de personajes ilustres que se pueden ver en los reversos de los sobrecillos de azúcar, sugar, sucre o açúcar o como quiera decirse y que se sirven con el desayuno.

La razón se compone de verdades que hay que decir y verdades que hay que callar. Conde de Rivarol (1753 - 1801).

Si los hombres han nacido con dos ojos, dos orejas, y una sola lengua es porque se debe escuchar y mirar dos veces antes de hablar. Madame de Sevigné.

Centrándonos en lo que al senderismo se refiere, el día, la ruta fue un calco de la semana anterior pero con más calor si cabe, aunque la única novedad es que además de tener un trayecto más corto al grupo se unió Paqui, circunstancia que a todos nos pareció pero que muy bien.

A las 9,30 h con foto incluida sobre el yacimiento arqueológico de la playa de Torrox pusimos la vista en la zona más oriental de la franja costera malagueña. El camino fácil y accesible transcurre
básicamente junto a la cuneta de la 340. La senda litoral desaparece en este trayecto por falta de espacio físico y consideramos difícil meter una vereda junto a la nacional, so pena de que el caminante pueda despeñarse acantilado abajo.

Cruzamos el río Torrox en su desembocadura por una zona de interés ecológico y gran aparcamiento con caravanas y numerosos extranjeros invernando. Atravesamos la playa del Sillón, pasamos de largo restaurantes con curiosos y chocantes nombres cómo Pepe Oro, Porto Banús, el Ancla de Cirilo, Almanzor y Choto Playa, para unos pasos más adelante constatar aun el regusto en garganta que el aceite de oliva nos había dejado tras la ingesta de los tejeringos, lo que nos sirvió para recordarnos que nos encontrábamos precisamente en la playa de Calaeite y de paso dar lugar a una de las distintas paradas de la jornada, esta vez ante un curioso retablo natural al aire libre con advocación a la Virgen del Carmen y al Cristo del Mar.

Puestos de nuevo en ruta, con rapidez sobrepasamos playa Vilchez pero en punta Lara hicimos un brindis con agua y de esta manera inmortalizarnos con fotografía incluida. En ese momento y entre las numerosas conversaciones que surgen en el camino abordamos lo perteneciente y relacionado con la segunda edad, límites y consecuencias de dicho segmento temporal. Tan delicado asunto de conversación se esfumó de nuestras mentes cuando nos dedicamos a abordar el último tramo llano y recto que precede la entrada a la villa de Nerja cuando absortos en el andar dejamos el Playazo a la derecha, cruzamos río Seco II y entre una arboleda de cultivos tropicales llegamos a las puertas de Narixa para atravesar el río Chillar y finalmente entrar en el casco urbano.

Callejeando por la localidad bajo jolgorio y risotadas nos topamos con James el escocés, vecino de la localidad y al que bien conocimos en el pasado Camino de Santiago en agosto de 2014. Sin duda todo un personaje.
Con la sorpresa por el encontronazo y al doblar la esquina de la parroquia del Salvador comprobamos cómo un coche de muertos de la funeraria La Esperanza y en servicio permanecía estacionado frente a numerosos establecimientos de guiris que a esa hora de la mañana desayunaban al solecito formando una escena que bien pudiera haberse extraído de una película de Berlanga. Ni que decir tiene que el ambiente desenfado y festivo que llevábamos encima quedó interrumpido. Momentos después el féretro entraba en el templo para dar inicio al sepelio de quien aquella mañanita de domingo de enero nos condujo a la verdadera realidad de la vida en aquella nuestra jornada de ocio y descanso.

Con el impacto del momento, a las 11,45 h, con mar en calma y ausencia de viento y para completar la escena algo de música de arpa, el sexteto caleño se asomó a lo que sin duda fue el motivo último de la salida dominical -el Balcón de Europa- y retratarnos ante una atenta fotógrafa barcelonesa pero muy española por cierto, que quiso colaborar con la causa y a la que los Trepacuestas no supimos despedirnos como hubiera sido necesario ya que al turista siempre una sonrisa y un cortes gràcies i adéu era lo que hubiera correspondido en ese preciso momento.

Aunque en el guión estaba visitar en esa agradable mañana de invierno azul el barco de Chanquete, famosa serie televisiva verano azul, lo cierto que el cuerpo nos pedía regresar y buscar el ALSA de las 12,55 h que nos condujera a nuestro punto de partida, no sin antes comprobar cómo nuestra
desconocida e improvista protagonista, G.R.P. y que a sus 79 años la que habíamos dejado minutos antes en la parroquia del Salvador, hacía ahora su entraba en el cementerio de San Miguel de la localidad, necrópolis donde yace desde 1995 Francisco Giner de los Ríos junto a su esposa, poeta que vivió en el exilio.

No miento si digo que la ruta concluyó al modo habitual, muy a la española dirían otros, cuando de cabeza y sin preguntarnos una vez más fuimos en busca o mejor dicho a rendir honores a la fideuá que con cerveza se sirve en el bar Hostal La Estación de Benajarafe todos los domingos de calendario sobre las 14,30 h.

Como igualmente los Trepacuestas somos tradicionalistas, conservadores y en modo alguno independentistas, entiéndase en el amplio sentido de la palabra, no nos fue difícil  desplazarnos unos escasos metros y convertirnos por unos instantes en una especie de modernos peregrinos y en definitiva poder cumplimentar, no sin excesivas dificultades en el día de la patrona de Ronda, a nuestro hoy proclamado patrono Salvador pastelero y a la que todos le pedimos por vía de Ntra. Sra. de la Paz que dios lo guarde muchos domingos de ruta y de esta forma cuide, mime y endulce estómagos y floras intestinales de próximas rutas.



Crónica de Pablo Portillo.