miércoles, 7 de diciembre de 2011

PICO VILO. ALFARNATE. 6 de Diciembre de 2011


Lo del pico Vilo en Alfarnate era cosa de tiempo. Como diría hace años el cantante Albert Hammond aquella montaña era “una espinita clavada en mi corazón” y no miento si digo que llevábamos tres años pensando en abordar esa mítica cota de la Axarquía, hasta que finalmente el pasado día de la Constitución y con un tiempo increíble por lo fenomenal de la temperatura -irrepetible para algunos- conseguimos coronarla.
 
Pero vayamos por partes que todo hay que contarlo y todo tiene que saberse.

Para que una cosa salga a bien hay que hacer los deberes correctamente desde el inicio. Qué mejor lugar y forma para citarse que en el Rincón de María de la Cala a las 8,00 h. ante unos churritos con café. Luego agrupados en dos vehículos dejamos Casabermeja a la izquierda, El Colmenar a la derecha para estacionar finalmente frente al campo de fútbol del Colegio Público -Ntra. Sra. de Monsalud- de Alfarnate con unos prometedores 9º.
 
Allí nos reunimos con el todo terreno de José Luís Claros que se unió a las andadas.

Como había muchas ganas de iniciar la marcha y sin más calentamiento y preámbulos a las 9,30 h. tomamos carril. Con salida tras el Centro de Salud con dirección a las antenas de radio que se encuentran en los montes aledaños de Alfarnate empezamos la ruta.

Para tomar contacto con la ascensión fuimos dejando sierra Gorda a nuestras espaldas y el puerto de los Alazores, lo que unido a un nítido cielo azul, difícil de identificar en una carta de colores, junto a la ausencia de nubes y viento, 9 senderistas 9, con la vista clavada en las antenas empezaban a tomar temperatura en sus músculos al mismo ritmo que el sol comenzaba a subir.

Pronto advertimos que el otoño con sus colores y luces se encontraba en su pleno apogeo. Sonidos de cencerros a lo lejos hizo lo demás. Todo muy bonito y todo muy fácil. Carril para arriba y rápido empezamos a identificar localidades como El Colmenar, Casabermeja, los famosos cortados del “Tajo Gómer”, “doña Ana” y de fondo el mar de Alborán. 

Dejamos un rebaño de cabras sin cabrero a nuestra izquierda y dado que estábamos en día de fiesta, pensamos que fueron las cabras las propias sorprendidas al tropezarse con esta bandada de caleños sin cencerros. 

La inercia de la marcha impuesta en ocasiones por Nati la rondeña y Reme la Antequerana, ¡vaya par de senderistas¡ hizo que nuevas referencias pasaran ante nosotros. Cima como el Santo Pítar, localidades como Comares, Torre del Mar, Vélez se colaron en un santiamén ante nosotros.
 
Tras una hora de recorrido dejamos el carril y nos adentrarnos en vereda. Cruzando la espesura de un pinar hicimos parada en busca del primer bocado. Antonio dio rienda a un inusual apetito matutino para 15 minutos después, cerramos temporalmente el estómago, no sin antes charlar distendidamente sobre temas tan banales como el pan de Guijarro, la Casa Real o los yogures de hoy día como Salvia, Danacor, Bífidus,... (obsérvese el dominio de algunos senderistas en esta materia) localizando minutos después una imponente era de altura que sirvió con idea de inmortalizar al grupo.

Con paso decidido y en paralelo a una tela metálica, pudimos observar al atravesar el bosque muchos troncos cortados que nunca fueron recogidos.

Con ganas de hollar el Vilo, a las 11,30 h. tuvimos debida recompensa al regalarnos el día de la Constitución una de las más bellas panorámicas que esta cima de 1.456 metros atesora.

Difícil o muy difícil describir lo que se podía ver en 360º a la redonda o al menos así lo entiende este humilde senderista metido a cronista. Por delante -sur-, el gran azul y de telón los montes de África con nubecillas. Por levante la imponte sierra Nevada, cargada con su nombre y haciendo honor a su blanco manto. Igualmente la Maroma con algunos minúsculos neveros. Fantástico el pantano de la Viñuela a nuestro pies ya que en ese momento el sol reflejaba en su lámina, haciendo confundir a la propia Reme sobre lo que era aquello. Esquinado el Boquete de Zafarraya. Más bajo Periana, Alcaucín, Canillas algo más lejos. Junto al mar Vélez y Torre del Mar. Girando la vista a la derecha la sierra de Mijas, la Concha de Marbella, el Torrecilla, … A la espalda -norte- el mítico puerto del Sol con sus curvas donde una “motillo” con dificultad ascendía el puerto bajo la atenta mirada y oído de todos, hasta que la perdimos de vista. Según Carlos Mesa, simplemente la “motillo gripó”.
 
Las fotos en el vértice geodésico de la cima fueron las estrellas del momento. Jose, Antonio y Salvador junto a un servidor, a modo turistas nipones, no dejamos de oprimir el obturador de las cámaras. Llamó la tención el buzón metálico allí ubicado en 1991 por un club alpino de Vizcaya.

Ciertamente no apetecía darse la vuelta. A nadie le hizo gracia la idea de regresar con lo bien que estábamos allí. Carlos Mesa mirando la nieve en camiseta ni se lo creía ¡estábamos en pleno mes de diciembre¡ Creo que fue Paco el que hizo el gesto de tomar la mochila y todos le seguimos.

La bajada resultó fácil hasta que Nati dio el culazo constitucional, golpeándose con el coxis en dura piedra. Según nos dijo se mareó y vio las estrellas o mejor dicho todo el sistema solar, el firmamento completo y vía láctea incluida. Para algunos aquel culazo-caída sencillamente fue algo parecido a la caída del imperio romano.

Como la cosa no estaba para bromas, nuestro particular druida Ruiz-Panoramix, sacó una especie de pócima-ungüento que debidamente aplicado en tan delicado lugar (suponemos que por Salvador) y tras un prudencial tiempo de recuperación, para alivio del grupo, con paso lento retomamos la bajada por el mismo camino que el de subida.

Uff,…, menos mal, pues un susto allí arriba -percance- nos hubiese costado un serio disgusto.

Los sufrimientos se acabaron cuando llegamos a Alfarnate sobre las 14,00 h. y a propuesta de Jose acudimos en peregrinación y sin rechistar al mesón la Villa con ánimo de degustar el exquisito jamón asado que tan reputada fama se le atribuye en toda la zona. El jamón hizo afición. O dicho de otra forma la afición quería jamón. Pero la cuestión es que a la vista y en el expositor vitrina del mostrador nadie quitaba ojo de una inmejorable morcilla que básicamente nos decía !!cómeme¡¡. Carlos Mesa y José Luís Claros, para no tentar la situación, fueron a la calle a fumarse un pitillo. Paco no lo dudó y atacó la morcilla con pan para satisfacción de todos. Aquel monumento gastronómico, seccionado convenientemente en rodajas con audacia por el propio Paco y bajo la atenta mirada del grupo fue el mejor antiinflamatorio que Nati pudo emplear. Ni que decir tiene que la rondeña recuperó de inmediato el color de cara zampando aquella pitanza.

La jornada acabó con Carlos Mesa haciendo la compra de la semana, pues a unas lentejas a 2,5 euros la bolsa, no paró hasta localizar una confitería abierta. El grupo arrambló con todos los roscos, magdalenas y bizcochos de la panificadora de calle la ermita 13. Con las bolsas colgando de las manos e introduciéndonos en los coches esta vez sin café (eso hay que arreglarlo para la siguiente ocasión) dimos por terminada esta fantástica ruta.

Crónica de Pablo Portillo






jueves, 1 de diciembre de 2011

Ruta senderista “La hoz del arroyo Marín” con visita a Archidona (27-11-2011).


La noche del sábado, en El Palo, delante de dos gigantescas pizzas y con las luces de Navidad de testigos decidimos realizar una salida el domingo. Pablo propuso una ruta senderista por “La hoz del arroyo Marín” combinada con una ruta cultural en Archidona con visita a la ermita de la Virgen de Gracia y a la plaza Ochavada.

Con la puntualidad habitual a las 10:00 horas salimos de La Cala del Moral once Trepacuestas y a las 11:00 horas aparcamos los tres automóviles en la avenida de Andalucía de Archidona, bonita localidad declarada Conjunto Histórico-Artístico.

Comenzó la ruta con la fotografía del grupo de excursionistas al lado del cartel anunciador de la ruta y a continuación por un carril terrizo y sólo habíamos andado unos 100 metros cuando nos sorprendió una hermosa panorámica de un pequeño valle llamado “La hoz del arroyo Marín”, a nuestra espalda, en su atalaya, con su blanco resplandeciente a la luz del sol estaba la ermita de la Virgen de Gracia.

El cielo de un azul nítido nos acompañó todo el día, la temperatura de primavera pero en otoño, un buen día para caminar por un paraje de singular belleza, un espectacular desfiladero en forma de hoz, excavado durante siglos por un arroyo y rodeado de una abundante vegetación en la que destaca un bosque de pino carrasco.

Iniciamos una fuerte pendiente descendente y dejamos el carril para continuar por una estrecha vereda, a media altura de la ladera de la montaña, paralela al arroyo. Todos comentábamos que el día era espléndido, el sol calentaba y empezó a sobrar ropa de abrigo.

A las 12:00 horas bajamos al arroyo y en un puente descansamos y aprovechamos para realizar algunas fotografías del grupo teniendo de fondo el agua y el bosque de ribera.

Decidimos continuar el paseo ahora junto al arroyo por un caminito en fila de a uno. Conforme avanzamos la humedad fue aumentando, en algunos lugares muy umbríos había escarcha y los troncos de los árboles cubiertos de musgos. Como no estamos acostumbrados a esta imágenes la expresión de todos fue “bonito…, que bonito….” otros utilizaron “precioso…, que lugar mas precioso…..”.

Antonio Machado escribió: “Descubrí el secreto del mar meditando sobre una gota de rocío”.

Las gotas de rocío impregnaban todas las plantas. En un lugar, en el que abundan las retamas, sus ramas estaban cubiertas de rocío y al reflejarse la luz del sol en las gotas, éstas se veían azules, verdes, amarillos, naranjas, todas de colores intensos y brillantes que unidos al vapor que despedían las plantas daban un aspecto fantástico. Un lugar mágico pero con una frialdad en el ambiente que llegaba hasta los huesos. Paraje de singular belleza catalogado como “Paraje sobresaliente de protección compatible”.

Cuando el desfiladero se hizo muy estrecho y umbrío el camino desapareció y el frío intenso hizo que todos nos abrigáramos. Volvimos sobre nuestros pasos y subimos a la vereda que está en la ladera de la montaña. La caricia del sol fue recibida por todos con la típica expresión: “que calorcito más agradable”.
El lugar para almorzar que elegimos fue cerca de un antiguo cortijo en un huerto abandonado que está presidido por un hermoso árbol de unos 15 metros, sin ninguna hoja y con muchos frutos de color amarillo anaranjado. Nuestra compañera Cele comentó que era un árbol de kaki, la dulce fruta del otoño, pero no de la variedad tipo tomate de color rojo que se come con cuchara, sino de la variedad persimo que al ser de mayor dureza la pulpa se come con tenedor.

Hay que resaltar que el típico menú Trepacuestas de bocadillos, dulces y fruta fue animado por José con una probable historia que le sucedió a un amigo con la guardia civil, con final de mucho suspense y sonora carcajada por todos los tertulianos. Seguiremos buscando la porra.

La vuelta a Archidona la hicimos por el camino que va junto al cauce del arroyo, por el precioso bosque de ribera donde destacan los álamos, olmos y fresnos.

A las 15:30 horas subimos en automóvil al Cerro de Gracia, catalogado como Parque Periurbano, desde ese balcón se contempla a nuestros pies la ciudad de Archidona con su plaza Ochavada y diversos templos, a nuestro alrededor contemplamos los restos de la muralla de la alcazaba árabe y su antigua mezquita hoy transformada en la ermita de Nuestra Señora de Gracia y al fondo “La hoz del arroyo Marín”.

El horario de visita comenzaba a las 16:00 horas, así que algunos subieron hasta la cima del cerro. Aproveche el tiempo admirando el “Castillo-Mezquita-Ermita Virgen de Gracia” y además estuve leyendo los paneles informativos sobre este monumento y los personajes históricos como Abderramán I y Omar Ben Hafsún que estuvieron en este lugar.
 
El patio y la ermita son preciosos y están en muy buen estado y con una limpieza extraordinaria. En la sala de oración hay seis columnas de la época romana y visigoda así como una pila bautismal de cerámica vidriada de color verde, todo el conjunto es de una extraordinaria  belleza.

Nuestra Señora de Gracia es la patrona de Archidona se encuentra pintada en un lienzo. Cada primer sábado de septiembre se baja a la Parroquia de Santa Ana y vuelve a su emita el domingo de la semana siguiente y también sale en procesión el “Día de la Oruga” en mayo.

Después de bajar del cerro con mucho cuidado y precaución por su fuerte pendiente y por sus curvas, visitamos la famosa Plaza Ochavada, con sus ocho lados, de estilo barroco con sus ladrillos rojos y sus paredes blancas de la cal.

Después del café de rigor, en la que comentamos que en primavera también sería recomendable repetir esta ruta, a las 18:30 horas estábamos de vuelta en La Cala del Moral.

Disfrutamos de un día de primavera a finales del mes de noviembre.

Finalmente, felicitar a José por su labor y por haber conseguido para los Trepacuestas la catalogación de “BLOG ANDALUZ”.


Crónica de Salvador Nieto.


domingo, 17 de julio de 2011

RUTA NOCTURNA A SAN ANTON. JULIO 2011

Quizá no es la mejor crónica. Recibo este encargo por sorpresa, pero lo acepto con gusto: hacer una crónica de la subida al monte de San Antón, llevada a cabo este jueves 14 de julio por un grupo de familias de la parroquia de la Cala del Moral, o mejor dicho, los TREPACUESTAS, junto a su párroco.


Pues bien, a eso de las 21:50, y luego de la foto oficial, nos encaminamos hacia la cima del monte. Los pequeños tomaron la delantera mientras algunos de los más grandes iban quedándose atrás, esto debido a que en realidad empezamos a subir con un ritmo rápido. José y Pablo  iban haciendo uso de sus dotes fotográficos. Como siempre sucede, son los que menos aparecen en las fotografías; pero, gracias a ellos, podemos conservar esos momentos en calidad fotográfica que nada tienen que envidiar a las fotografías de Sebastião Salgado.

Mientras ellos tomaban las fotografías, al final del grupo se alcanzaba a vislumbrar  a Rosa, Salvador, Antonio y Natividad. Durante la subida ocurrió un milagro, upsssss… ocurrió algo curioso: ¡¡¡ ¿Rosa no hablaba?!!! ¿Por qué? Por una apuesta hecha antes de empezar a subir. Definitivamente fue una gran penitencia para Rosa.
A las 22:10 nos detuvimos a la par de una cueva para hacer el reagrupamiento, minutos valiosos para tomar algunas fotografías a la luna que sólo le faltaba un día para estar llena; de igual manera dio tiempo para poder localizar las ferias del Rincón de la Victoria y la feria del Palo. 
A eso de la 22:30, al ritmo de “guantanamera”, que sonaba en la feria del Palo, llegamos a la cima. ¡Qué vista de Málaga! Al instante llegaba Rosa hablando, cumplió su apuesta: subió San Antón sin decir ni una palabra; los niños le ovacionaron: “Esa Rosa como mola se merece una ola…uhhhhh….uhhhhhh…, se merece otra ola…uhhhhhh…..uhhhhhhh…..,un tsunami….ehhhh…ehhhh….ehhhh” 

Fue una noche estupenda: un clima fresco que hizo a algunos sacar su abrigo, a otros les invitaba a  dormir como lo hizo “Zacarías”, perdón, Neftalí, en una roca, para él cómoda. Tras ubicarnos y contemplar la belleza de la naturaleza, nos dispusimos a comer nuestro bocadillo. Fue una noche amena con chistes, risas y canciones. Mientras los pequeños entonaban: “Unch tolón tolón”, “soy una taza” y “que le estará pasando al pobre de Fidel”; los grandes comentaban, entre otros temas, la próxima acampada con los niños de perseverancia en el Robledal.
A eso de las 23:45 hicimos la lectura del texto “los dos remos”, poco lo comentamos pero estoy seguro que a cada uno nos dijo algo. Descubrimos la importancia de contar con los demás y con Dios. Como diría Madre Teresa de Calcuta: “lo que yo hago vosotros no lo podéis hacer; lo que tú haces nosotros no lo podemos hacer; pero juntos podemos hacer algo bonito para Dios”.

Luego de esto, la fotografía junto a la cruz que preside aquel monte, y en dicha cruz la bandera de los TREPACUESTAS. A eso de las 00:15 empezamos a bajar, muchos resbalones pero ninguna caída que lamentar. Tanto a la subida como al bajar, la luna, espectacular en esta noche, nos alumbraba el camino y casi no hacía falta de linternas. La bajada estuvo llena de anécdotas: el nuevo camino para bajar inventado por los niños y José; y la subidita de kilos de José, cierto o no, fue tema de la bajada. Y al llegar abajo, la felicitación a Antonio por su cumpleaños: ¡¡¡felicidades!!!
Y como lo que empieza tiene que terminar, cada uno volvió a su hogar contento de haber compartido un momento agradable junto a los amigos; yo, ténganlo por seguro, más que ustedes.
Un agradecimiento a los TREPACUESTAS por la oportunidad. Gracias familia.

ULISES MENDOZA

jueves, 9 de junio de 2011

DIA DE CAMPO Y CONVIVENCIA AL ROBLEDAL. 28de Mayo de 2011


El sábado 28 de Mayo fue el día elegido por D. Rafael ,nuestro  párroco ,para  llevar a cabo la jornada de convivencia que cada año  clausura  el curso  de catequesis,  tras la celebración de las Primeras Comuniones .Este año el lugar elegido ha sido El Robledal, en la provincia de Granada y a la cara norte de La Maroma. Allí, en tan idílico lugar, pudimos disfrutar de un agradable día , que tuvo de todo un poco, pues el sitio se presta a cualquier modalidad de actividad campestre.
 
La jornada comenzó rondando las 9 de la mañana, a esa hora  las campanas de la iglesia saludaban a los que llegaban a la cita ataviados con botas, mochilas y algunos bastones de senderistas, mucha chiquillería, como es natural, pues para ellos son fundamentalmente estas convivencias. Como no, un nutrido grupo de los Trepacuestas asistimos a tal evento como es ya costumbre.

Tras los saludos partimos rumbo a la axarquía en el autobús contratado para la ocasión aunque algunos viajaron en vehículos particulares por razones de logística y transporte. En el bus caían los kilómetros entre canticos , charla amena y como no, el rezo del rosario. Entre tanto, la comodidad de la autovía dio paso a la serpenteante carretera que se adentra en la provincia de Granada atravesando el boquete de Zafarraya, donde más de un estómago se vio alterado por las curvas.

A la derecha de la venta de La Alcaicería parte el carril que nos lleva hasta la cara norte de sierra Tejeda, por allí  nos adentró el autocar dejándonos a unos 500 metros de nuestro destino, la zona recreativa del Robledal, una buena iniciativa para, digamos, "forzar" la caminata de los menos "caminantes".
Como aún era temprano, poco más de las 10,30 de la mañana, se propuso hacer alguna ruta por los alrededores, por lo tanto la mayoría nos dispusimos a caminar mientras otros se quedaron en el "campo base" guardando las viandas y las pertenencias.

Nos encaminamos dirección a La Maroma, o al menos empezamos a discurrir por el carril que a ella lleva, hasta llegar al punto donde los caminos de separan, a la izquierda la alta cumbre de  Sierra Tejeda y a la derecha a Los Barracones, lugar donde nos dirigimos.

Los Barracones eran las antiguas viviendas de los trabajadores jornaleros que cuidaban y trabajaban en la sierra, siendo abandonados después, y posteriormente, hacia mediados de la década de los 90 del pasado siglo, recuperados y restaurados por el ayuntamiento de Alhama de Granada, convirtiéndolos así en un albergue juvenil enclavados en un bonito paraje.

 
Una vez descansados y explorado el lugar, y después de que algunos dieran buena cuenta del fruto de un magnifico cerezo, volvimos sobre nuestros pasos a buscar el almuerzo y el descanso después de la caminata.
 
Como en todas las convivencias de la parroquia también se celebró la Eucaristía, esta vez antes de la comida, ya que D. Rafael y Pepe tenían que volver pronto por motivos parroquiales. Nunca dejará de emocionarme la celebración de la misa en el campo, es un cúmulo de sensaciones distintas a las percibidas bajo el techo de la iglesia, desde aquí animo a todo el que tenga la oportunidad de vivir tal experiencia.

Y ya la comida..... en esta ocasión el menú Trepacuestas dio paso a  todo un lujo  de almuerzo elaborado por primorosas manos y después compartido, como también fue compartida la animada charla de la sobremesa donde se quiso arreglar el mundo hablando de lo humano y de lo divino, Además de eso también hubo tiempo para  que las catequistas jugaran con los chavales a alguna actividad que ya llevaban preparada.
 
Cuando se está a gusto y en buena compañía el tiempo corre más de la cuenta, eso fue lo que pasó aquel día, cuando quisimos darnos cuenta ya era la hora de recoger y partir hacia el punto de encuentro donde nos reencontraríamos de nuevo con el  autobús para volver desde las altas tierras axarquicas  hasta la costa y puerta de la comarca, volviendo a hacer estragos la zigzagueante carretera en forma de mareos, así,  rondando las 8 de la tarde, arribamos a la plaza de la iglesia donde nos despedimos hasta una próxima cita esperando que sea pronto.

Gracias a todos y a todas por tan inestimable jornada y compañía.

Crónica de José.

lunes, 30 de mayo de 2011

RUTA ACUÁTICA en 3-D por las HOCES del ARROYO JABONERO (22 de Mayo de 2011)


La elección fue sabia y los Trepacuestas no dejaron lugar a la duda sobre cual era el mejor programa que se les ofrecía. El día anterior, sábado de reflexión, en la mesa del Burguer Playa la deliberación fue corta y una vez más José Manuel con acertado criterio propuso como candidatura senderista la subida acuática por el Jabonero. Fue casualidad o coincidencia de ideología pero no hubo necesidad de votación, ni siquiera la abstención tuvo su espacio. Entre papas, camperos y pizzas y por aclamación se decidió que la salida campera fuese pasada por agua.

Luego en el Irish Swan, con un pequeño mitin de final de campaña y bajo los efectos de algunas cervezas se reivindicó eso de Senderismo real ya !!!, que a la postre nos permitió clarificar algunos detalles de la escapada.

Ni que decir tiene que el resultado fue recibido con algarabía por la juventud, a excepción de Ana Nieto y su repentina cojera. La llamada del campo sirvió para que incluso Ángel dejase atrás por unas horas su esguince y que los pequeños sacasen del trastero sus bañadores y chanclas playeras.

No hubo necesidad de madrugar, hecho que mejoró el estado de ánimo de algunos y si a eso unimos el magnífico día que se nos presentó, ello contribuyó a que la jornada dominical fuese mojadamente redonda.

Aunque la urna del Jabonero siempre está ahí, este modesto arroyo durante unas determinadas semanas al año y con suerte para los vecinos de la zona, nos da la oportunidad y emulando un poco al Chillar de Nerja, el poder disfrutar de su potencial acuático. Si bien las comparaciones son odiosas, este querido arroyo atesora un potencial ecológico muy interesante.

Pronto hubo necesidad de meterse en harina, mejor dicho en agua y sin bandera Trepacuestas que nos guiase en esta ocasión, pero uniformados con el ya clásico color rojo comenzó el disfrute de la jornada.

La expedición se encontró con unos osados motoristas de trial que con dificultad intentaban vadear un importante socavón en el torrente. Pronto se convino en tomar posesión al modo de los indignados de la Puerta del Sol madrileña en el margen derecho del arroyo bajo un frondoso olivo, para que Francis, las dos Anas, Mari Carmen y Ángel se divirtieran en una poza. Cómo sería la intensidad del baño de éstos caleños que incluso su ímpetu en el agua hizo que el croar de las ranas cesara por algunos minutos.

Todo lo anterior sirvió para que con interés Salvador, Nati, José Manuel y un servidor acometiésemos la subida por las hoces del Jabonero entre un decorado de adelfas y muchas ranas en un soleado día de finales de mayo, con las Tetas de Málaga por fondo por un lado, la Venta el Mirador por otro y el partido de los Montes de Málaga por opción senderista y que hizo más llevadera la caminata.

Al sorprendente frescor del cauce y a la sinfonía de sensaciones, junto con el ruido del agua, todo ello hacía que nuestros oídos tuviesen problemas para asumir ese estado natural de las cosas.

Entre la increíble limpieza del lecho del arroyo, la claridad del agua y sin dificultad aparente continúo el día, dando cuenta del gaseoducto Málaga-Rincón que enterrado por aquellos pagos nos llamó la curiosidad y todo ello hasta llegar a la parte final que es fácilmente identificable por un arco de acueducto a la izquierda del margen del arroyo y que nos recordó el pasado rural del Jabonero con sus huertas y bancales que por doquier jalonaban aquel bello trozo del río.
 
Una presa con un buen caudal de agua dio un ambiente peliculero o aventurero si se quiere y a los que allí nos acercamos nos llamó mucho la atención el desnivel existente. Nos sorprendió gratamente el hecho de que estando a tan escasos minutos de la nacional 340, pueda existir un paraíso abierto al público tan cerca como aquel escondido paraje.

Una vez de regreso y bajo el ya mencionado olivo y tras un frugal almuerzo Trepacuestas dimos inicio a un campeonato de lanzamiento de huesos de cerezas, donde este humilde cronista se confirmó como un buen escupidor de huesos, siendo propuesto por algunos para que con deportividad represente a los Trepacuestas en el próximo concurso de lanzamiento en la fiesta de la cereza de Alfarnate.

Conmovido por el desafío y mientras los niños disfrutaban en ese SPA natural que es el Jabonero, los mayores al raso se disponían a dar comienzo a una dura siesta, para más tarde entablar una inesperada charla pseudo filosófica con preguntas y respuestas de lo más variopintas.

Como la tertulia discurrió por un derrotero ciertamente difuso, un servidor y sin intención de causar males mayores cesó en el parloteo y H2O de por medio a escasos metros de donde parábamos localizó lo que dijimos en llamar Centro de Orientación Sintoísta del Palo ya que junto a elementos primarios como el agua, fuego y la naturaleza se cobijaba un pequeño icono en el que se podía leer ATREVETE COMO ELLA.

Contentas las féminas con la explicación dada y como la gazuza apretaba, Celes sacó a modo de conejo de una chistera un paquete de galletas de canela, cosa que fue muy aplaudido -todo un éxito en aquella hora de la tarde- y como por arte de magia desapareció sin saber bien los Trepacuestas como pudo obrar semejante truco.

Pero fue nuestro querido Francis quien en un sorpresa de las suyas nos hizo ver en 3-D aspectos de la vida que realmente nadie esperaba en aquel lugar.

Como todo lo bueno acaba, a tiempo nos batimos en retirada en busca de un helado para los pequeños, te frío en vaso largo con hielo y marcando estilo para las mujeres y el necesario y tradicional café para los hombres. La venta el Gato en Jarazmín nos acogió en una tarde de Comuniones.

Finalmente decir que sirva está pequeña crónica a modo de acta de lo que ocurrió el día de Santa Rita y pensando en el incierto futuro del senderismo en Rincón de la Victoria nos despedimos todos con Paqui y su dolor abdominal junto con Ángel camino del servicio de urgencia del Palo por su esguince.

Crónica de Pablo Portillo.